Con el programa de Calles de Verano (Summer Streets), los neoyorquinos no sólo se liberan de los autos por unas horas, sino que también se integran y disfrutan de los espacios públicos, dijo ayer Oscar Díaz, integrante del directorio del Instituto de Políticas para el Transporte y el Desarrollo (ITDP por sus siglas en inglés).
Díaz, quien en la última década ha sido responsable de coordinar el proyecto Ciclovía en la ciudad de Bogotá, Colombia, aseguró que con la implementación de dicho programa en Nueva York, se quitan espacios a los automóviles, y las personas toman conciencia sobre el uso de medios de transporte alternos, como la bicicleta.
“Estoy seguro que Calles de Verano será una experiencia inolvidable para los residentes de esta zona y sobre todo un atractivo turístico para los extranjeros, en especial que aprenden a convivir en un espacio público, en donde todos son iguales”, indicó Díaz en entrevista con este medio.
El programa Summer Street será implementado en esta ciudad durante los primeros tres sábados de agosto y prohibirá la circulación de autos a lo largo de cinco millas de calles y avenidas. El primer cierre se llevará a cabo el 9 de agosto entre las 7:00 a.m. y 1:00 p.m. Al menos 15 calles del oeste de Manhattan serán cerradas a la circulación de autos, entre ellas Canal, la 14 y la 42.
Díaz, quien asesora a funcionarios del Departamento de Transporte de la ciudad (DOT) para la implementación del programa, explicó que en todo el corredor se impartirán clases de Yoga, y aeróbicos, al mismo tiempo que varios grupos artísticos amenizarán el corredor. “En el caso de Bogotá, el programa Ciclovía se ha institucionalizado y hoy en día se cuenta con 121 kilómetros libres de autos durante los días domingo y en donde las personas pueden hacer lo que quieran con sus avenidas sin preocuparse que un auto los va a atropellar”, precisó Díaz. Lo más importante en este plan, continuó el integrante de ITDP, es que las personas se ejercitan. “Porque utilizar una bicileta y caminar no solo ayuda a las personas a reducir las tensiones muscular, sino que también beneficia su sistema circulatorio. Es muy saludable el concepto”.
La Ciclovía de Bogotá surgió en 1974 y con el paso de los años se ha ido ampliando a otros puntos de la ciudad. En la actualidad, más de un millón de bogotanos participan en diversas actividades recreativas y deportivas de una forma segura y eficiente.